EL pegamento de balonmanoEl balonmano pegamento, también llamado balonmano pegamento, es una disciplina deportiva que poco a poco se ha ido imponiendo en el seno de federaciones y clubes. Se caracteriza por el uso de una resina en las manos de los jugadores para facilitar el agarre del balón. Esta sustancia, aunque controvertida, se ha consolidado como un elemento esencial para muchos profesionales. En este artículo, discutiremos los diferentes aspectos del balonmano con pegamento y las razones de su éxito.
El auge del balonmano pegado en las federaciones
Anteriormente, la práctica del balonmano no requería el uso de resina. Sin embargo, con el tiempo y la evolución del nivel de juego, se comprobó que esta sustancia proporcionaba un mejor agarre y permitía a los jugadores realizar acciones técnicas más espectaculares. Así, fue adoptada paulatinamente por federaciones y clubes, a pesar de las prohibiciones iniciales.
Adopción gradual de resina.
Los primeros usos de la resina se remontan a los años 70, especialmente en los países escandinavos. En aquella época, se utilizaba principalmente para superar los problemas de adherencia relacionados con el frío y la humedad. Sin embargo, dadas las ventajas que aportaba, cada vez más equipos empezaron a utilizarlo de forma habitual.
Esto generó cierta tolerancia por parte de los órganos rectores, que finalmente autorizaron su uso en competiciones oficiales. Hoy en día, la mayoría de los equipos utilizan la resina y es una parte integral del balonmano moderno.
Normas que rigen el uso de resina.
Para evitar abusos y garantizar un cierto equilibrio entre los equipos, existen normas estrictas en el uso de resina en los partidos. Entre ellas :
- Las federaciones sólo autorizan determinadas marcas de resina.
- Se debe limitar la cantidad de resina en las manos de los jugadores.
- Los árbitros podrán pedir a los jugadores que eliminen el exceso de resina antes del inicio del partido.
Las ventajas del pegamento de balonmano para los jugadores
La principal ventaja de la resina radica en mejorar el agarre de la pelota. De hecho, gracias a esta sustancia, los jugadores pueden agarrar el balón con más precisión y fuerza, facilitando el pase, el tiro y el regate. Además, la resina permite realizar acciones técnicas complejas, como fintas o arrullos, que contribuyen al espectáculo del balonmano.
Mejor agarre de la pelota
La resina proporciona un mayor agarre entre las manos de los jugadores y el balón, lo que permite un mejor control del juego. Los pases son más fluidos y los tiros más precisos, haciendo que el balonmano sea más dinámico y espectacular.
Acciones técnicas facilitadas
El uso de resina también ha dado lugar a nuevas acciones técnicas, antes imposibles de realizar sin esta ayuda. Entre ellos, podemos citar el famoso «kempa» o «invertido», que atrajo tanto a los jugadores como a los espectadores.
Controversias en torno al uso de resina
A pesar de sus ventajas, el uso de resina en el pegamento de balonmano no está exento de críticas. De hecho, a menudo se le señala por los problemas que causa, especialmente en términos de mantenimiento de los pabellones deportivos y de salud de los jugadores.
Pabellones deportivos dañados
La resina es una sustancia pegajosa que se adhiere fácilmente a los pisos y paredes del gimnasio. Por lo tanto, puede causar daños importantes si no se limpia con regularidad. Esto supone un coste adicional para los ayuntamientos, que deben asumir los costes de mantenimiento y reparación.
Riesgos para la salud de los jugadores
Algunos expertos creen que el uso regular de resina podría tener efectos adversos en la salud de los jugadores. En particular, se ha sugerido que podría provocar alergias en la piel o irritaciones del tracto respiratorio. Sin embargo, estas hipótesis no han sido confirmadas por estudios científicos y siguen siendo objeto de debate hasta el día de hoy.
El pegamento de balonmano, una elección estratégica para los clubes
Ante las polémicas en torno al uso de resina, determinados clubes han optado por seguir practicando balonmano sin esta sustancia. Sin embargo, es innegable que ofrece ventajas competitivas a los equipos que lo utilizan. Así, en función de los objetivos deportivos y de las limitaciones presupuestarias, cada club debe sopesar los pros y los contras antes de integrar el balonmano pegado en su práctica.